jueves, abril 10, 2008

Espera, dichosa espera

Esperar es malo.

Puede ser algo agradable, y muy bonito, ir contando las horas, minutos, y segundos, hasta que al final llega. Se suman la ilusión, las ganas, el buen humor... y parafraseando a la reina de hielo... "todo puede ser hermoso". Iba a poner mi, pero conociendo lo malpensados que sois los tres gatos que me leéis, prefiero no hacerlo, al menos, hasta tener el beneplácito de poder rendir pleitesía a tamaña dama. En ese momento, pondré el mi, a pesar de los lujuriosos y pecaminosos pensamientos de los contertulios. En fin, que me desvío...

Algún día tendré que pedir cuentas a dicha señorita, puesto que la expresión es, cómo expresarlo... ñoña de cojones. Pero ahí queda.

Sin embargo, a pesar de todo, las esperas pueden ser muy largas. Sigues contanndo horas, minutos, segundos, milisegundos, microsegundos, y nanosegundos, debido a que el estar sin tener nada mejor que hacer que leer cosas por Internet aburre, y, por si alguien no lo sabe, el aburrimiento es capaz de tornarse en un agujero negro subjetivo, alterando la continuidad del espacio-tiempo hasta tal punto en el que la mente despega una y otra vez, se aleja miles de kilómetros, para volver al mismo sitio, y comprobar con desesperación que no han pasado ni dos minutos desde la última mirada al reloj.

Pero va quedando menos... va quedando menos. Y poco a poco se va acercando el momento. La adrenalina vuelve a recorrer mi cuerpo mientras mi mente se vuelve a despegar momentáneamente en un viaje pseudo-onírico, a la espera de los próximos acontecimientos.

Esperemos, y deseemos, que todo sea como en la frase ñoña, cambiando corazoncitos y cosas rositas, azucaradas y malas para el colesterol, por sangre y vísceras, más propias de una criatura memoníaca como el aquí presente, aderezado con unas verduritas y algo de fruta, que hay que cuidarse en salud y comer hierba es sano, leñe.

Y todo... en las próximas horas.

Y como comentario ajeno al post, aunque parezca que hablo de ello en todo este desvarío... Jo, tengo hambre, y aún quedan 15 minutos para que abra el comedor.

4 comentarios:

la reina del hielo dijo...

También es hermoso lo de la sangre y las vísceras, todo tiene su punto.

Robin Shilvadin dijo...

Pero esperar... QUE??? Me has dejado con la mosca...

Di dijo...

holas! no me he enterado de nada! jajaja...pero me gusta cómo escribes! No sé si esperas a una chica o a comer! jajaja...tienes un blog muy original y chulo! Ays no sé cómo caí aquí pero amenazo con volver! Saludos!

Trystan dijo...

Amenazas? Nunca está de más tener un nuevo lector de mis inventuras y desventuras. Bienvenido seas.